Hoy os presentamos el TFG de Rosa Mª Bombardó del grupo 2013-2014 de Miquel Lacasta y Marta García-Orte.
Recordad que en menos de un mes se inaugura la exposición de este año en el Museu Nacional d’Art de Catalunya. ¡Estad atentos a nuestras redes para no perderos ningún detalle!
MEMÓRIA
El ámbito para la nueva Sede de MercaBarna Flor forma parte de la red de espacios libres que hay en el tramo entre Montcada – Trinitat. Se encuentra entre los flujos biológicos ADN de Barcelona como el río Besos a levante, Collserola a poniente y la Serralada Prelitoral.
Situado en el centro de Vallbona y conectado con Torre Baró, Can Cuiàs, Ciutat Meridiana, Montcada y Barcelona; la nueva Sede de Mercabarna Flor se convierte en un punto de centralidad y conectividad bien comunicado con sus alrededores.
La Sub-Sede de Mercabarna Flor configura la puerta al sector agrario y se asoma a un entorno natural privilegiado. Pasa a formar parte del círculo de mercados de Catalunya dedicados a la floricultura, entre ellos el Mercat de Flor i Planta de Catalunya y Mercabarna- Flor.
IDEAS GENERALES :
El edificio da la espalda al tren, donde se sitúa el muelle de carga y descarga y se desarrolla el flujo de movimiento entre mayoristas y compradores; en el lado contrario, el edificio da permeabilidad a la plaza y establece el outlet de flores que da condiciones urbanas al lugar.
Esta disposición comporta dos situaciones diferenciadas: uno de carga y descarga y el otro donde se retopografía para dar un lado más paisajístico con plantas trepadoras y bancales que configura un paisaje habitado.
La nueva sede queda regulada por la altura del tren y por los edificios circundantes. El conjunto se involucra en el paisaje también a través de su cubierta tipo Deck y acabado vegetal. El proyecto pasa a formar parte del entorno y las plantaciones que le rodean.
Oficinas en vertical, y complementos, flores y plantas en horizontal , organizan el edificio. Su extremo finaliza con el Instituto de investigación y desarrollo con su almacén y despachos individuales para investigadores.
El acceso principal se situará en la plaza de las flores donde confluyen el camino de conexión al resto del parque agrario, el camino de unión del sistema de plazas del centro de Vallbona y dónde hay parada del autobús urbano. Los 4 accesos restantes corresponden al acceso directo a complementos, flores, plantas y al centro de I+D.
ESTRUCTURA Y CONSTRUCCIÓN
Se plantea una estructura metálica que permita liberar la planta baja de pilares y obtener la máxima altura libre de manera que el Mercado disponga de la máxima flexibilidad de distribución funcional dentro de un amplio volumen.
Una estructura portante en la que la geometría configura el espacio; un lugar de uso flexible que mezcla venta, producción e investigación. La estructura define el todo del edificio. Queda definida por una jácena triangular que a la vez es lucernario y recogida de aguas pluviales. Una solución que es estructura, pasarela, plaza, edificio.
La cubierta vegetal de las oficinas y del mercado aísla el edificio manteniendo el calor durante el invierno y el frio durante el verano, lo que permite un ahorro energético.
Las fachadas de las oficinas que miran a los campos y a la ciudad se componen de 2 a 4 invernaderos de 1,50 de espesor, llenos de plantas trepadoras con diferentes especies de flores: buganvillas, convolvulaceae, pasifloras. Las plantas tienen una gran capacidad de aclimatación y abundante floración. Estas fachadas atienden a criterios bioclimáticos y funcionan como amortiguador entre el aire exterior y el aire en interiores.
El resto de fachadas que configuran las oficinas se componen por una fachada ventilada de doble policarbonato que permite la circulación interior del aire que entra y sale a través de rejillas lineales en cada forjado abiertas permanentemente. Esta convección natural controla la transmisión térmica hacia el interior en verano, la época más desfavorable.
El centro de I+D queda definido por un módulo de madera independiente que se encuentra en el interior del invernadero. La piel exterior de policarbonato crea un efecto invernadero para los periodos de más frío y a la vez se abre para crear ventilaciones cruzadas.
Texto de Rosa Mª Bombardó
Rafa Bennasar, Equipo Cultura ESARQ-UIC